Capítulo 17, versos 16-21
16
Mientras Pablo les esperaba en Atenas, estaba interiormente indignado al ver la ciudad llena de ídolos.
17
Discutía en la sinagoga con los judíos y con los que adoraban a Dios
18
Trababan también conversación con él algunos filósofos epicúreos y estoicos. Unos decían: «¿Qué querrá decir este charlatán?» Y otros: «Parece ser un predicador de divinidades extranjeras.» Porque anunciaba a Jesús y la resurrección.
19
Le tomaron y le llevaron al Areópago
20
Pues te oímos decir cosas extrañas y querríamos saber qué es lo que significan.»
21
Todos los atenienses y los forasteros que allí residían en ninguna otra cosa pasaban el tiempo sino en decir u oír la última novedad.