Capítulo 20, versos 15-18
15
Al día siguiente nos hicimos a la mar y llegamos a la altura de Quíos
16
Pablo había resuelto pasar de largo por Éfeso, para no perder tiempo en Asia. Se daba prisa, porque quería estar, si le era posible, el día de Pentecostés en Jerusalén.
17
Desde Mileto envió a llamar a los presbíteros de la Iglesia de Éfeso.
18
Cuando llegaron donde él, les dijo: «Vosotros sabéis cómo me comporté siempre con vosotros, desde el primer día que entré en Asia,