Capítulo 27, versos 2-7
2
Subimos a una nave de Adramitio, que iba a partir hacia las costas de Asia, y nos hicimos a la mar. Estaba con nosotros Aristarco, macedonio de Tesalónica.
3
Al otro día arribamos a Sidón. Julio se portó humanamente con Pablo y le permitió ir a ver a sus amigos y ser atendido por ellos.
4
Partimos de allí y navegamos al abrigo de las costas de Chipre, porque los vientos eran contrarios.
5
Atravesamos los mares de Cilicia y Panfilia y llegamos al cabo de quince días a Mira de Licia.
6
Allí encontró el centurión una nave alejandrina que navegaba a Italia, y nos hizo subir a bordo.
7
Durante muchos días la navegación fue lenta y a duras penas llegamos a la altura de Gnido. Como el viento no nos dejaba entrar en puerto, navegamos al abrigo de Creta por la parte de Salmone