Capítulo 5, versos 18-22
18
echaron mano a los apóstoles y les metieron en la cárcel pública.
19
Pero el Angel del Señor, por la noche, abrió las puertas de la prisión, les sacó y les dijo:
20
«Id, presentaos en el Templo y decid al pueblo todo lo referente a esta Vida.»
21
Obedecieron, y al amanecer entraron en el Templo y se pusieron a enseñar. Llegó el Sumo Sacerdote con los suyos, convocaron el Sanedrín y todo el Senado de los hijos de Israel, y enviaron a buscarlos a la cárcel.
22
Cuando llegaron allí los alguaciles, no los encontraron en la prisión