Ver da Capítulo Verso Capítulo Verso
[...]   Porque, además, corremos peligro de ser acusados de sedición por lo de hoy, no existiendo motivo alguno que nos permita justificar este tumulto.» Dicho esto disolvió la asamblea.   [...]

Hechos de los Apóstoles: capítulo 19, verso 40

Search results

Term: amos • Found: 91
Pedro, al ver esto, se dirigió al pueblo: «Israelitas, ¿por qué os admiráis de esto, o por qué nos miráis fijamente, como si por nuestro poder o piedad hubiéramos hecho caminar a éste?
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 3, Verso 12
Porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres por el que nosotros debamos salvarnos.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 4, Verso 12
Al instante mandé enviados donde ti, y tú has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros, en la presencia de Dios, estamos dispuestos para escuchar todo lo que te ha sido ordenado por el Señor.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 10, Verso 33
«En aquel momento se presentaron tres hombres en la casa donde nosotros estábamos, enviados a mí desde Cesarea.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 11, Verso 11
El Espíritu me dijo que fuera con ellos sin dudar. Fueron también conmigo estos seis hermanos, y entramos en la casa de aquel hombre.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 11, Verso 12
«También nosotros os anunciamos la Buena Nueva de que la Promesa hecha a los padres
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 13, Verso 32
«Amigos, ¿por qué hacéis esto? Nosotros somos también hombres, de igual condición que vosotros, que os predicamos que abandonéis estas cosas vanas y os volváis al Dios vivo que hizo el cielo, la tierra, el mar y cuanto en ellos hay,
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 14, Verso 15
Nosotros creemos más bien que nos salvamos por la gracia del Señor Jesús, del mismo modo que ellos.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 15, Verso 11
Enviamos, pues, a Judas y Silas, quienes os expondrán esto mismo de viva voz:
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 15, Verso 27
Al cabo de algunos días dijo Pablo a Bernabé: «Volvamos ya a ver cómo les va a los hermanos en todas aquellas ciudades en que anunciamos la palabra del Señor.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 15, Verso 36
En cuanto tuvo la visión, inmediatamente intentamos pasar a Macedonia, persuadidos de que Dios nos había llamado para evangelizarles.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 10
Nos embarcamos en Tróada y fuimos derechos a Samotracia, y al día siguiente a Neápolis
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 11
de allí pasamos a Filipos, que es una de las principales ciudades de la demarcación de Macedonia, y colonia. En esta ciudad nos detuvimos algunos días.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 12
El sábado salimos fuera de la puerta, a la orilla de un río, donde suponíamos que habría un sitio para orar. Nos sentamos y empezamos a hablar a las mujeres que habían concurrido.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 13
Sucedió que al ir nosotros al lugar de oración, nos vino al encuentro una muchacha esclava poseída de un espíritu adivino, que pronunciando oráculos producía mucho dinero a sus amos.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 16
Al ver sus amos que se les había ido su esperanza de ganancia, prendieron a Pablo y a Silas y los arrastraron hasta el ágora, ante los magistrados
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 19
Pero Pablo le gritó: «No te hagas ningún mal, que estamos todos aquí.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 16, Verso 28
Pues te oímos decir cosas extrañas y querríamos saber qué es lo que significan.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 17, Verso 20
Nosotros, después de los días de los Azimos, nos embarcamos en Filipos y al cabo de cinco días nos unimos a ellos en Tróada donde pasamos siete días.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 20, Verso 6
Había abundantes lámparas en la estancia superior donde estábamos reunidos.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 20, Verso 8
Nosotros nos adelantamos a tomar la nave y partimos hacia Asso, donde habíamos de recoger a Pablo
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 20, Verso 13
Cuando nos alcanzó en Asso, le tomamos a bordo y llegamos a Mitilene.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 20, Verso 14
Al día siguiente nos hicimos a la mar y llegamos a la altura de Quíos
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 20, Verso 15
Despidiéndonos de ellos nos hicimos a la mar y navegamos derechamente hasta llegar a Cos
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 1
Encontramos una nave que partía para Fenicia
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 2
Avistamos Chipre y, dejándola a la izquierda, íbamos navegando rumbo a Siria
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 3
Habiendo encontrado a los discípulos nos quedamos allí siete días. Ellos, iluminados por el Espíritu, decían a Pablo que no subiese a Jerusalén.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 4
Cuando se nos pasaron aquellos días, salimos y nos pusimos en camino. Todos nos acompañaron con sus mujeres e hijos, hasta las afueras de la ciudad. En la playa nos pusimos de rodillas y oramos
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 5
Al siguiente partimos y llegamos a Cesarea
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 8
Al oír esto nosotros y los de aquel lugar le rogamos que no subiera a Jerusalén.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 12
Como no se dejaba convencer, dejamos de insistir y dijimos: «Hágase la voluntad del Señor.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 14
Venían con nosotros algunos discípulos de Cesarea, que nos llevaron a casa de cierto Mnasón, de Chipre, antiguo discípulo, donde nos habíamos de hospedar.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 16
Haz, pues, lo que te vamos a decir: Hay entre nosotros cuatro hombres que tienen un voto que cumplir.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 21, Verso 23
Se levantó, pues, un gran griterío. Se pusieron en pie algunos escribas del partido de los fariseos y se oponían diciendo: «Nosotros no hallamos nada malo en este hombre. ¿Y si acaso le habló algún espíritu o un ángel?»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 23, Verso 9
Estos, pues, se presentaron a los sumos sacerdotes y a los ancianos y le dijeron: «Bajo anatema nos hemos comprometido a no probar cosa alguna hasta que no hayamos dado muerte a Pablo.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 23, Verso 14
Citado Pablo, Tértulo dio principio a la acusación diciendo: «Gracias a ti gozamos de mucha paz y las mejoras realizadas por tu providencia en beneficio de esta nación,
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 24, Verso 2
Ha intentado además profanar el Templo, pero nosotros le apresamos.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 24, Verso 6
Interrogándole, podrás tú llegar a conocer a fondo todas estas cosas de que le acusamos.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 24, Verso 8
Al otro día arribamos a Sidón. Julio se portó humanamente con Pablo y le permitió ir a ver a sus amigos y ser atendido por ellos.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 3
Partimos de allí y navegamos al abrigo de las costas de Chipre, porque los vientos eran contrarios.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 4
Atravesamos los mares de Cilicia y Panfilia y llegamos al cabo de quince días a Mira de Licia.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 5
Durante muchos días la navegación fue lenta y a duras penas llegamos a la altura de Gnido. Como el viento no nos dejaba entrar en puerto, navegamos al abrigo de Creta por la parte de Salmone
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 7
y costeándola con dificultad, llegamos a un lugar llamado Puertos Buenos, cerca del cual se encuentra la ciudad de Lasea.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 8
La nave fue arrastrada y, no pudiendo hacer frente al viento, nos abandonamos a la deriva.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 15
Hacía ya días que no habíamos comido
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 21
Era ya la décima cuarta noche que íbamos a la deriva por el Adriático, cuando hacia la media noche presintieron los marineros la proximidad de tierra.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 27
Estábamos en total en la nave 276 personas.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 37
y los demás saliesen unos sobre tablones, otros sobre los despojos de la nave. De esta forma todos llegamos a tierra sanos y salvos.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 27, Verso 44
Arribamos a Siracusa y permanecimos allí tres días.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 28, Verso 12
Desde allí, costeando, llegamos a Regio. Al día siguiente se levantó el viento del sur, y al cabo de dos días llegamos a Pozzuoli.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 28, Verso 13
Encontramos allí hermanos y tuvimos el consuelo de permanecer con ellos siete días. Y así llegamos a Roma.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 28, Verso 14
Cuando entramos en Roma se le permitió a Pablo permanecer en casa particular con un soldado que le custodiara.
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 28, Verso 16
Pero deseamos oír de ti mismo lo que piensas, pues lo que de esa secta sabemos es que en todas partes se la contradice.»
Hechos de los Apóstoles, Capítulo 28, Verso 22
De là, continuant par mer, nous arrivâmes le lendemain vis-à-vis de Chios. Le jour suivant, nous cinglâmes vers Samos, et le jour d’après nous vînmes à Milet.
Actes des Apôtres, Chapitre 20, Verse 15
Sailing from there, we came the following day opposite Chios. The next day we touched at Samos and stayed at Trogyllium, and the day after we came to Miletus.
Acts of the Apostles, Chapter 20, Verse 15
E em nenhum outro há salvação, porque também debaixo do céu nenhum outro nome há, dado entre os homens, pelo qual devamos ser salvos.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 4, Verso 12
Dizendo: Achamos realmente o cárcere fechado, com toda a segurança, e os guardas, que estavam fora, diante das portas
Atos dos Apóstolos, Capítulo 5, Verso 23
Dizendo: Não vos admoestamos nós expressamente que não ensinásseis nesse nome? E eis que enchestes Jerusalém dessa vossa doutrina, e quereis lançar sobre nós o sangue desse homem.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 5, Verso 28
E os doze, convocando a multidão dos discípulos, disseram: Não é razoável que nós deixemos a palavra de Deus e sirvamos às mesas.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 6, Verso 2
Escolhei, pois, irmãos, dentre vós, sete homens de boa reputação, cheios do Espírito Santo e de sabedoria, aos quais constituamos sobre este importante negócio.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 6, Verso 3
E logo mandei chamar-te, e bem fizeste em vir. Agora, pois, estamos todos presentes diante de Deus, para ouvir tudo quanto por Deus te é mandado.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 10, Verso 33
E nós vos anunciamos que a promessa que foi feita aos pais, Deus a cumpriu a nós, seus filhos, ressuscitando a Jesus
Atos dos Apóstolos, Capítulo 13, Verso 32
E dizendo: Senhores, por que fazeis essas coisas? Nós também somos homens como vós, sujeitos às mesmas paixões, e vos anunciamos que vos convertais dessas vaidades ao Deus vivo, que fez o céu, e a terra, o mar, e tudo quanto há neles
Atos dos Apóstolos, Capítulo 14, Verso 15
Enviamos, portanto, Judas e Silas, os quais por palavra vos anunciarão também as mesmas coisas.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 15, Verso 27
E alguns dias depois, disse Paulo a Barnabé: Tornemos a visitar nossos irmãos por todas as cidades em que já anunciamos a palavra do Senhor, para ver como estão.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 15, Verso 36
E, logo depois desta visão, procuramos partir para a Macedônia, concluindo que o Senhor nos chamava para lhes anunciarmos o evangelho.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 16, Verso 10
Mas Paulo clamou com grande voz, dizendo: Não te faças nenhum mal, que todos aqui estamos.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 16, Verso 28
Na verdade até corremos perigo de que, por hoje, sejamos acusados de sedição, não havendo causa alguma com que possamos justificar este concurso.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 19, Verso 40
E, depois dos dias dos pães ázimos, navegamos de Filipos, e em cinco dias fomos ter com eles a Trôade, onde estivemos sete dias.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 20, Verso 6
Nós, porém, subindo ao navio, navegamos até Assós, onde devíamos receber a Paulo, porque assim o ordenara, indo ele por terra.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 20, Verso 13
E, navegando dali, chegamos no dia seguinte defronte de Quios, e no outro aportamos a Samos e, ficando em Trogílio, chegamos no dia seguinte a Mileto.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 20, Verso 15
E aconteceu que, separando-nos deles, navegamos e fomos correndo caminho direito, e chegamos a Cós, e no dia seguinte a Rodes, de onde passamos a Pátara.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 1
E, achando um navio, que ia para a Fenícia, embarcamos nele, e partimos.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 2
E, indo já à vista de Chipre, deixando-a à esquerda, navegamos para a Síria e chegamos a Tiro
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 3
E, achando discípulos, ficamos ali sete dias
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 4
E no dia seguinte, partindo dali Paulo, e nós que com ele estávamos, chegamos a Cesaréia
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 8
E, ouvindo nós isto, rogamos-lhe, tanto nós como os que eram daquele lugar, que não subisse a Jerusalém.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 12
E, como não podíamos convencê-lo, nos aquietamos, dizendo: Faça-se a vontade do Senhor.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 14
E foram também conosco alguns discípulos de Cesaréia, levando consigo um certo Mnasom, cíprio, discípulo antigo, com quem havíamos de hospedar-nos.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 16
E, logo que chegamos a Jerusalém, os irmãos nos receberam de muito boa vontade.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 21, Verso 17
E, como se determinou que havíamos de navegar para a Itália, entregaram Paulo, e alguns outros presos, a um centurião por nome Júlio, da coorte augusta.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 1
E chegamos no dia seguinte a Sidom, e Júlio, tratando Paulo humanamente, lhe permitiu ir ver os amigos, para que cuidassem dele.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 3
E, tendo atravessado o mar, ao longo da Cilícia e Panfília, chegamos a Mirra, na Lícia.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 5
E, como por muitos dias navegássemos vagarosamente, havendo chegado apenas defronte de Cnido, não nos permitindo o vento ir mais adiante, navegamos abaixo de Creta, junto de Salmone.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 7
E, costeando-a dificilmente, chegamos a um lugar chamado Bons Portos, perto do qual estava a cidade de Laséia.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 8
E, sendo o navio arrebatado, e não podendo navegar contra o vento, dando de mão a tudo, nos deixamos ir à toa.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 15
E ao terceiro dia nós mesmos, com as nossas próprias mãos, lançamos ao mar a armação do navio.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 19
E éramos ao todo, no navio, duzentas e setenta e seis almas.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 27, Verso 37
E, chegando a Siracusa, ficamos ali três dias.
Atos dos Apóstolos, Capítulo 28, Verso 12
E, logo que chegamos a Roma, o centurião entregou os presos ao capitão da guarda
Atos dos Apóstolos, Capítulo 28, Verso 16
No entanto bem quiséramos ouvir de ti o que sentes
Atos dos Apóstolos, Capítulo 28, Verso 22